El paraje de Císcar, en el término municipal de La Font de la Figuera se ha convertido desde 2020 en el epicentro del enoturismo más desenfadado de la mano de Bodegas Arráez, el proyecto vitivinícola de esta saga de vinateros a cuyo frente se encuentra la tercera generación, encarnada por el enólogo Toni Arráez. Aunque ya habían desarrollado un interesante proyecto enoturístico en sus antiguas instalaciones, ubicadas dentro del casco urbano de La Font de la Figuera), no fue hasta hace cuatro años cuando comenzaron a construir su particular concepto del enoturismo en su nueva bodega, alzada en el paraje de Císcar, en Terres dels Alforins.