Anora, la ‘escort’ de 23 años que trabaja en un local de Nueva York y prefiere que la llamen Ani, vive en una casa situada junto al metro elevado, como Brad Pitt y Gwyneth Paltrow en ‘Seven’. Ivan, o Vania, el hijo de un oligarca ruso, de 21 años, vive en lo que ella define como un casoplón. La reducida habitación de Ani define su mundo sin expectativas de futuro. La mansión con grandes cristales que dan al río, un ascensor para subir a la primera planta y estancias más espaciosas de lo que la muchacha podía imaginar, define también lo que es Ivan, un joven inmaduro y consentido que desafía las reglas de sus padres durante una semana, casándose con Ani y prometiéndole un mundo de fantasía y confort que sabremos que no tendrá.